Hoy vengo con otra receta de las clásicas. Estas galletas las he hecho un montón de veces pero no las tenía publicadas aún.
Esta vez he innovado un poco y las he rellenado de nutella, haciéndolas más bomba todavía. Bomba calórica también, pero un día es un día!
Es una receta muy fácil, de esas que se pueden hacer también con los pequeños. Podéis hacerlas con pepitas ya compradas o trocear el chocolate que más os guste. Yo he optado por el chocolate con leche, que es el que más me gusta.
INGREDIENTES:
500 gr de harina
200 gr de azúcar
250 gr de azúcar moreno
225 gr de mantequilla a temperatura ambiente
2 huevos
1 cucharada de esencia de vainilla
1 cucharada de bicarbonato sódico
500 gr de chocolate troceado o pepitas de chocolate
130 gr de crema de cacao
ELABORACIÓN:
Antes de preparar las galletas, hacemos las lágrimas de nutella.
Para ello, metemos la nutella en una manga y formamos pequeños montones sobre un papel de horno. Llevamos al congelador de media a una hora.
Mezclamos la harina con el bicarbonato y reservamos.
Batimos los huevos con unas varillas eléctricas. Añadimos la mantequilla y el azúcar y seguimos batiendo hasta que esté todo integrado.
Añadimos la esencia de vainilla y mezclamos.
Incorporamos la harina y vamos mezclando suavemente. Cuando no podamos más, seguimos con las manos.
Añadimos las pepitas e integramos con la masa. Refrigeramos 30 minutos.
Una vez fría la masa, cogemos una cantidad del tamaño de una pelota de ping pong, la aplanamos un poco con la ayuda de las manos, colocamos una lágrima de nutella, y la cubrimos con la masa, dándole forma de pelota.
Las colocamos sobre un papel de horno y horneamos unos 10 minutos a 180ºC.
Pasado el tiempo, sacamos la bandeja del horno y dejamos enfriar un poco en la misma antes de pasarlas a una rejilla, dónde terminarán de enfriarse.
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